Si hablamos acerca de uno de los más grandes hitos de la cultura mochica, sin duda, es el hallazgo de la tumba del Señor de Sipán. Te invitamos a descubrir las memorias de este gran ícono de la historia y su significado para el Perú y el mundo.
¿Quién fue el Señor de Sipán?
Este antiguo gobernante de mochica es una de las figuras arqueológicas más importantes de América, perteneciente al siglo III. Este máximo jerarca vivió, aproximadamente, hasta los cuarenta años.
Sus restos fueron encontrados, intactos y sin huellas de saqueos, por el doctor Walter Alva y su equipo de investigadores en Huaca Rajada.
El féretro en que fue enterrado era único en su modelo; este hecho marcó y demostró la majestuosidad de este guerrero del antiguo Perú.
Y, en vista de, las pruebas de ADN mediante las cuales se han estudiado los rasgos genéticos, se pudo precisar el color de piel, de cabello y algunas otras características físicas, como que medía aproximadamente 1.67 cm.
¿Dónde se encuentra ubicada la tumba del Señor de Sipán?
Debido a la trascendencia cultural de los hallazgos y con el objetivo de dar a conocer el valor que representa este personaje histórico, se fundó, en el año 2002, un museo arqueológico conocido como el “Museo Tumbas Reales de Sipán”, en el departamento de Lambayeque.
Este complejo se caracteriza por su diseño arquitectónico, basado en las remotas pirámides de la cultura mochica y el cual exhibe joyas, cerámicas, atuendos hallados en el ataúd del gobernante y más de dos mil ornamentos.
Si deseas conocer más de cerca este descubrimiento, te animamos a visitarlo. Se ubica a tan solo 25 minutos de la ciudad de Chiclayo, considerado hoy en día, como uno de los atractivos turísticos más concurridos e importantes de la zona norte del Perú
¿Qué hallazgos descubrieron en la tumba del gobernante de mochica?
En el sarcófago de esta figura se lograron recuperar más de 600 objetos, entre ellos:
- Vestimenta y tres pares de orejas de crisocola y oro.
- Un collar armado por frutos orgánicos de maní, que representaba el comienzo o renacer.
- Piedras preciosas.
- Objetos de cerámica y madera tallada.
Así mismo, se encontraron restos de ocho personas, de los cuales tres eran mujeres, cuatro hombres y un niño. Según las investigaciones que se llevaron a cabo, las mujeres fueron consideradas como sus concubinas, mientras que los hombres tenían aspecto de jefe militar, vigía y un soldado.
Incluso, a su adyacente, se localizaron las tumbas de “El Sacerdote” y el “Viejo Señor de Sipán”.
En el primero hallaron elementos que lo identificaban como un jerarca religioso, además de portar símbolos como el sol y la luna, una corona de cobre bañada en oro y decorada con un búho de alas abiertas, entre otros elementos.
El segundo, era un antepasado directo de nuestro personaje histórico, su cámara tenías fichas de la progresión real, con componentes de oro, plata y pectorales de cocha, considerado como parte de una alta jerarquía hereditaria de la civilización mochica.
Por último, había un canino, que pudo haber representado a la mascota más cercana del difunto, y dos llamas, que simbolizaban contribuciones.
El gobernador y sus súbditos
Según las últimas indagaciones, junto con la información de la cultura en mención, arqueólogos comenzaron a construir lo que sería una imagen de la vida de este personaje.
Quién es evidente que era reconocido como un Dios para su pueblo, con libertad de tener las concubinas que deseara y el poder de poseer las joyas más valiosas de la época.
Acerca de la cultura mochica y su reconocimiento
Es una cultura muy reconocida del antiguo Perú, que se creó entre los siglos segundo y quinto en el valle del río Moche, en la rama de La Libertad. Esa cultura fue localizada en los valles del norte del Perú.
Moche se especializó en obras de diseño impulsadas por agua, como: canales del sistema de agua y represas, que les permitió hacer crecer su desierto agrario a una escala considerable.
Eran modeladores excepcionales y su materia prima era el adobe. Fabricaron edificios religiosos y administrativos, habitado por residencias reales y santuarios o huacas que los consolidaron con vastas pinturas murales de alta y baja ayuda. Estas eran representadas con tonalidades obtenidas de los recursos naturales.
Son reconocidos como los mejores ceramistas del antiguo Perú, debido al trabajo que ejecutaron en la elaboración de loza.
Su arte era, tanto a nivel pictórico como escultórico, sobre divinidades, criaturas y escenas notables que aludían a temas estilizados y sueños que señalaba su origen en el mundo.
Eran mentores singulares, elaboraban corceles totora, los cuales eran diminutos quienes pescaban con caña y colosales para sus viajes a las costas, desde donde adquirían la concha Spondyllus.
El Señor de Sipán, considerado como el poderoso soberano de la cultura moche, es un símbolo que seguirá siendo contado en todo el mundo y transmitido de generación en generación.